TRAS EXPLOSIÓN EN TIENDA WALDO’S; VÍCTIMAS MURIERON POR INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

Hermosillo, Sonora.-

Una fuerte explosión registrada la tarde de este sábado 1 de noviembre en una tienda Waldo’s, ubicada sobre la Avenida Doctor Noriega, entre Matamoros y Juárez, dejó un saldo preliminar de 23 personas fallecidas y 12 lesionadas, según confirmó la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE).

El Fiscal General, Gustavo Rómulo Salas Chávez, informó que la mayoría de las víctimas murieron por inhalación de gases tóxicos, lo que permitirá su identificación mediante procedimientos forenses.

“Tenemos ocho familias que están preguntando por 14 familiares que tenemos en calidad de desconocidos en las instalaciones de SEMEFO. En las próximas horas serán identificados; primero de manera fotográfica y posteriormente con reconocimiento físico”, explicó el fiscal.

Salas Chávez subrayó que, hasta el momento, no existen indicios de que el incendio haya sido provocado, aunque no se descarta ninguna línea de investigación.

“Queremos ser muy responsables y enfáticos en señalar que no tenemos ningún elemento de prueba que apunte a una causa intencional”, agregó.

Las autoridades estatales y peritos especializados continúan trabajando en el lugar del siniestro para determinar las causas exactas de la explosión, que dejó una profunda consternación en la comunidad hermosillense.

Por su parte, el gobernador Alfonso Durazo Montaño, a través de un mensaje en video difundido en sus redes sociales, confirmó las cifras de víctimas y expresó su solidaridad con las familias afectadas.

“Hasta el momento van 23 personas fallecidas y 12 lesionadas que están siendo atendidas en seis diferentes hospitales de la ciudad. Lamentablemente entre las víctimas se encuentran menores de edad. A las familias les expreso mi más sincera solidaridad, apoyo y cercanía”, manifestó el mandatario estatal.

Las investigaciones continúan para esclarecer las circunstancias de esta tragedia que ha enlutado a Hermosillo y que representa uno de los accidentes más graves de los últimos años en la capital sonorense.